En 1911 el magnate platanero Samuel Zemurray decidió convertir Honduras en su plantación privada. Reunió algunos gángsteres, como Guy Ametralladora Maloney y Lee Christmas; formó un ejército privado e invadió la nación, instalando a su amigo Manuel Bonilla como presidente del país.
En 1933 Zemurray se convirtió en presidente de la United Fruit Company, poniéndola a producir en masa banano en inmensas plantaciones, que distribuía por todo el mundo en barcos frigoríficos. Su modelo de negocio se basaba en los siguientes principios:
- Busca un país débil.
- Soborna a sus dirigentes.
- Asegúrate de que el gobierno sirve a tus intereses. Si no lo hace, derrócalo y remplázalo por uno que sí lo haga.
- Quema sus selvas y sustitúyelas por plantaciones.
- Haz que los trabajadores dependan de ti, reprímelos y aplasta cualquier huelga o intento de sindicalismo.
El término «república bananera» se inventó para describir las democracias serviles que se crearon para favorecer a las empresas frutícolas de Centroamérica.
A principios de la década de 1950, el pueblo guatemalteco eligió al prestigioso militar Jacobo Arbenz. Un hombre honrado.
En ese momento Guatemala era un país casi feudal y Árbenz comenzó a adoptar una serie de medidas de corte progresista para solucionar la situación de atraso que padecía el país. Porque las tres cuartas partes de la población disponía de menos del 10% de las tierras cultivables, y la United Fruit Company, que había comenzado su actividad en el país en 1904, era dueña de más del 50%.
Era una corporación en la que tenían intereses personales directos, el secretario de Estado del gobierno estadunidense, John Foster Dulles, cuyo bufete de abogados la representaba, y su hermano Allen, director de la CIA, que se sentaba en su consejo de administración.
Además de poseer plantaciones en Guatemala, la United Fruited Company también las tenía en Colombia, Costa Rica, Cuba, Jamaica, Nicaragua y Panamá. En 1928 había sido la responsable de la tristemente famosa Masacre de las Bananeras, una huelga de 25.000 trabajadores de Colombia, que terminó ahogada en un baño de sangre.
Los grandes terratenientes locales y la United Fruit Company acusaron al gobierno de Árbenz, de seguir los dictados de la Unión Soviética.
El presidente estadounidense Eisenhower ordenó acabar con esos «comunistas», y la CIA se encargó de financiar y organizar una invasión de mercenarios, apoyados por aviones, que combinada con un golpe de estado, depuso al presidente electo.
Aunque lo demás es historia, el modelo se mantiene. Los años no pasan por él.
(Extracto. Adaptación libre)
Imágenes: crónica|micubaporsiempre.wordpress.com|entornointeligente.com
Fuentes: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-48686137
https://es.wikipedia.org/wiki/United_Fruit_Company#Declive_y_quiebra_de_la_UFCO
