El viernes 11 de marzo de 2022, se produjo una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, a petición de Rusia, en la que ésta presentó documentos que prueban:
- La financiación oficial del Pentágono de un programa de armas biológicas en Ucrania.
- Los nombres de las personas y empresas estadounidenses involucradas.
- La ubicación de dichos laboratorios (varios en la frontera con Rusia), y los intentos por ocultar su existencia.
- Las enfermedades y epidemias con las que están experimentando, entre las que se encuentra la actual pandemia de Covid 19, y los murciélagos utilizados para su transmisión.
- Que EEUU está desarrollando actualmente armas biológicas en 36 países del mundo.
Algo que Estados Unidos niega, y que Francia y Gran Bretaña, aliados suyos, desmienten.
La OMS (Organización Mundial de la Salud) rechazó asimismo tener conocimiento de que se estuvieran efectuando experimentos de guerra biológica en Ucrania, señalando que lo único que sabían, era que se trataba de laboratorios de investigación médica para combatir enfermedades. Pero Rusia presentó documentos que demuestran las visitas frecuentes de expertos de la OMS a los laboratorios sospechosos.
Durante la campaña militar de Ucrania, Rusia descubrió la existencia de aves numeradas. Estudiando las rutas de migración de las aves a lo largo de las estaciones, los zoólogos aprenden cómo viajan de un país a otro. Algunas aves migratorias son «arrestadas», digitalizadas, provistas de una cápsula con el patógeno, y de un chip de identificación, en los laboratorios biológicos de Ucrania, controlados por EEUU, antes de ser dejadas en libertad para que regresen con sus congéneres.
Se monitorea su desplazamiento con satélites, determinando en cada momento su ubicación exacta. Si quieren, por ejemplo, dañar a un país, el chip se destruye cuando lo está sobrevolando; el pájaro muere, y al caer, esparce la enfermedad. Así, se consigue dañarlo sin coste alguno militar, económico, o político. Las aves que transportan los patógenos letales, se convierten así en un arma de destrucción masiva.
De 145 especies, eligieron 2 que vuelan a Rusia. Los rusos dicen que han capturado algunas de esas aves, lo que significa que los norteamericanos han sido cogidos con las manos en la masa.
En el territorio de Ucrania se ha observado en los últimos años un gran incremento de la rubeola, la difteria y la tuberculosis, y los casos de sarampión se han multiplicado por 100. La OMS ha reconocido que Ucrania tiene muchas posibilidades de sufrir un brote de polio.
El Ministerio de Salud de Ucrania ordenó la destrucción de estos patógenos de sus laboratorios al comenzar la invasión rusa el 24 de febrero del 2022.
Entr
e los agentes descubiertos se encontró en Kiev el virus H5N1, que tiene una tasa de mortalidad del 50%, el del antráx y la brucelosis en Lvov, el de la difteria, el de la salmonela y el de la disentería en Jarkov y Poltava.
Se sabe que se han tomado muestras de sangre y de ADN de grupos étnicos eslavos para crear patógenos dirigidos específicamente a ellos, ensayándolos en ciudadanos ucranianos, sin su conocimiento ni consentimiento, convirtiéndolos en cobayas involuntarias.
Todo hace pensar que los virus que han infectado a los humanos en el siglo XXI, como los del ébola, que afectó a África, el del ántrax, el de la fiebre porcina, el de la gripe aviar, y actualmente el del SARS-CoV-2, responsable de la Covid-19, han salido de laboratorios creados por EEUU en el extranjero.
Un acto de bioterrorismo, y un crimen contra la humanidad, por el que China ha presentado una petición urgente para realizar una investigación internacional.
(Extracto. Adaptación libre)
Imágenes: veintitres.com.ar| lavozenlinea.com.mx| expertoanimal.com|pirchile.com
Fuentes:
https://astillasderealidad2.blogspot.com/2022/03/la-guerra-de-ucrania-destapa-la.html
