Las autoridades israelíes han demolido sólo en el año 2016 más de 1.000 viviendas de familias palestinas; cifra récord que ha dejado sin hogar a alrededor de 7.100 personas, según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
El informe, que recoge los datos hasta el 28 de diciembre, cifra en un total de 1.089 el número de propiedades palestinas que han sido derribadas en Cisjordania y Jerusalén Este.
Por otra parte, más de 51.000 palestinos siguen viviendo en refugios temporales en la Franja de Gaza como consecuencia de la devastadora ofensiva israelí de 2014, en la que murieron 400 niños y otros 2.500 resultaron heridos. La mayoría de ellos viven en refugios temporales proporcionados por organizaciones de ayuda humanitaria, ha explicado la ONU en un comunicado.
Un niño o niña palestina que tenga 7 años ha sufrido ya tres ofensivas israelíes, la de 2008-2009, la de 2012 y la de 2014, y se calcula que unos 370.000 menores necesitan urgentemente ayuda psicológica.
El movimiento de bienes parece remontar desde que Israel ha aliviado ligeramente el bloqueo que impone desde el año 2007 a la Franja de Gaza, pero la tensión sigue presente en la zona desde el fracaso de las conversaciones de paz , a pesar de lo cual, la ONU ha detectado una reducción significativa en el número de víctimas del conflicto.
Hasta el 26 de diciembre de 2016, habían perdido la vida 109 palestinos y 13 israelíes, bastante por debajo de los 169 palestinos y 25 israelíes que resultaron muertos durante 2015. Sin embargo los derribos de casas han continuado incrementándose.
(Extracto. Adaptación libre)
Imágenes: O’ REILLY Reuters|elpais
http://www.elmundo.es/internacional/2014/08/05/53e0aaea22601d3a188b4575.html